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Categoría: San Andres

Marzo 15 del 2024.-Un cuestionamiento que se hacen numerosas personas en el mundo es si el sexo se puede considerar ejercicio, dado el desgaste físico que se siente luego del acto sexual.

De acuerdo con una información publicada en UNAM Global, el sexo es una actividad aeróbica, ya que implica el movimiento de varios músculos, y pueden quemarse de 50 a 100 calorías, dependiendo de la intensidad con que se haga.

¿El sexo se puede considerar ejercicio?

Sin embargo, considera que no se trata de ejercicio como tal, sino de una actividad más ligada al placer.

Basa sus conclusiones en un artículo publicado en la Harvard Health Publishing, que plantea que después de cierta edad los hombres comienzan a preguntarse si el sexo es buena forma de hacer ejercicio o si es demasiado extenuante para el corazón.

Los investigadores evaluaron a 19 hombres con edad promedio de 55 años para revisar los efectos cardiovasculares de la actividad sexual.

Monitorearon a los voluntarios ejercitándose en una caminadora y durante el sexo, tomando lecturas de frecuencia cardíaca y presión arterial.

Más extenuante una caminadora que el sexo

El resultado fue que los hombres manifestaron que la caminadora había sido más extenuante.

Dentro de una escala de intensidad de 1 a 5, siendo 5 la más alta, los hombres calificaron la caminadora con 4.6 y al sexo con 2.7.

También participaron mujeres en este estudio, pero en menor medida. Como con los hombres, los resultados mostraron que el sexo fue aún menos extenuante en términos de frecuencia cardíaca, presión arterial e intensidad percibida del esfuerzo.

Hombres gastan más energía pensando en el sexo

Señala que al parecer los hombres gastan más energía pensando y hablando de sexo que en el acto tal cual, pues la frecuencia cardíaca durante los encuentros sexuales raramente superó 130 latidos por minuto y su presión sistólica casi siempre se mantuvo por debajo de 170.

De los voluntarios que participaron, 75% estaban casados, 70% tenía alguna enfermedad cardiovascular y 53% consumía bloqueadores beta (medicamentos para reducir presión arterial y la cantidad de trabajo que realiza el corazón).